Queremos denunciar desde este blog otro nuevo atentado contra nuestro patrimonio, esta vez en la cercana villa de Marvao. Y decimos "nuestro" patrimonio porque, aunque muchas personas no lo entiendan, el patrimonio histórico, al igual que el cultural y el natural, no pertenece a nadie en concreto, sino que nos pertenece a todos, aunque sean personas o instituciones concretas las que se encarguen de gestionarlo en un determinado momento.
El atentado en cuestión consiste en un conjunto de obras llevadas a cabo con el fin de mejorar el aspecto de esta villa, candidata a ser declarada patrimonio de la Humanidad. Lo que en teoría deberían de haber sido unas obras beneficiosas, tras más de un año de haber comenzado se han convertido en todo lo contrario. Sustitución de losas de granito antiguas por otras modernas de color rosado, mobiliario más adecuado para una nueva urbanización que para una villa medieval, bocas anti incendios que llaman más la atención que las propias casas, cajas de plástico de 1,5 m. de altura presentes en cada esquina, además de otros "pequeños detalles". Afortunadamente el presupuesto de estas obras ha sido "tan solo" de dos millones de euros. Miedo da pensar qué se podría haber hecho con algunos millones más. ¿Quizás un ascensor para dar accesibilidad a la torre del castillo?.
Viendo las amenazas que se ciernen sobre el castillo de Alburquerque, así como los hechos consumados que se están produciendo en Marvao, se puede llegar a pensar que existe una conspiración para evitar que se lleve a cabo el proyecto de ICOMOS (Comité Español del Consejo Internacional de Monumentos y sitios) de declarar patrimonio de la Humanidad las villas abaluartadas de la frontera Extremeño-alentejana, entre las que Alburquerque y Marvao son dos pilares fundamentales.
Esta absurda idea puede llegar a ser la única explicación con cierta lógica que lleve a explicar lo que está ocurriendo. Idea que, aunque absurda, resulta más interesante que la simple explicación de que los gestores de nuestro patrimonio no están llevando a cabo su obligación de protegerlo y fomentarlo, guiados a veces por intereses que no comprendemos y apoyados por arquitectos que quieren dejar su impronta a toda costa.
Varios medios de comunicación se han hecho eco de este problema, entre ellos el "Diário de Noticias"
Todas aquellas personas que deseen conocer más sobre lo que está ocurriendo en Marvao pueden ponerse en contacto con Luisa Assis, cuyo correo electrónico es: paxjustica@gmail.com
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