En su comparecencia en la radio de la semana pasada, el alcalde de Alburquerque, Ángel Vadillo, emplazó a la gente a una reunión para hoy viernes día 27. A este acto asistirían "verdaderos expertos en patrimonio" a defender el proyecto de hospedería, al contrario que en el acto de la Plataforma para la Defensa del Patrimonio, en el que los ponentes "no tenían ni idea de patrimonio".
La convocatoria de una acto informativo, a pesar de las descalificaciones habidas, era considerado por nuestra plataforma como una noticia positiva, ya que por fin podríamos comprobar si realmente existen argumentos sólidos que justifiquen tal proyecto.
Hasta ahora, los argumentos que se esgrimían para apoyar tal obra carecían de ninguna base sólida: "que traerá progreso al pueblo", "que es necesario para que los minusválidos accedan al castillo", "que es la única manera de conservar el castillo", y similares.
Pensábamos que con el acto que se iba a celebrar hoy por fín podríamos ver un estudio de viabilidad económica (hasta ahora ausente), que nos explicarían por qué no vale simplemente con construir una rampa de acceso al castillo y no un ascensor para permitir el acceso a minusválidos, que qué pasaba con los artículos de la ley de patrimonio que incumple este proyecto, etc.
Pero, desafortunadamente, tendremos que seguir planteándonos esas dudas, ya que de la reunión no se ha vuelto a oir hablar.
Quizás se haya aplazado para otra ocasión; quizás nunca se celebre. En cualquier caso tendremos que seguir esperando para conocer qué es lo que opinan "los verdaderos expertos en patrimonio"
viernes, 27 de abril de 2007
domingo, 22 de abril de 2007
El proyecto de hospedería aún no ha sido aprobado por la Comisión de Patrimonio
Tal y como ya afirmó Antonio Manzano Marchirant, Presidente de la Asociación de Amigos de Badajoz, en el acto público celebrado por la Plataforma para la defensa del patrimonio de Alburquerque el viernes 13 de abril, el proyecto de construcción de una hospedería de lujo en el castillo de Alburquerque aún no ha sido aprobado por la Comisión de Patrimonio de la Junta de Extremadura.
El Alcalde de Alburquerque, Ángel Vadillo, realizó una comparecencia tras el citado acto público con el fin de rebatir los argumentos que en él se expusieron. Los cuatro pilares fundamentales en los que Ángel Vadillo se basó para negar tales argumentos fueron:
1.- Teoría de la conspiración política: "la oposición al proyecto de la hospedería tiene como único fin el descrédito político y personal del alcalde"
2.- Descrédito personal de los ponentes en el acto.
3.- Ignorar la mayoría de los argumentos y preguntas que se expusieron.
4.- Y finalmente, como novedad, aportación de documentación, donde se podría comprobar que el Proyecto de Hospedería está aprobado por la Comisión de Patrimonio.
Sobre los tres primeros puntos queda poco que decir. Respecto al último, queda demostrado con todos los datos aportados por Antonio Manzano que la Comisión de Patrimonio aún no ha dado el visto bueno al proyecto.
Aquellos que deseen leer la respuesta dada por Antonio Manzano al periódico hoy a las acusaciones vertidas por el alcalde de Alburquerque.
El Alcalde de Alburquerque, Ángel Vadillo, realizó una comparecencia tras el citado acto público con el fin de rebatir los argumentos que en él se expusieron. Los cuatro pilares fundamentales en los que Ángel Vadillo se basó para negar tales argumentos fueron:
1.- Teoría de la conspiración política: "la oposición al proyecto de la hospedería tiene como único fin el descrédito político y personal del alcalde"
2.- Descrédito personal de los ponentes en el acto.
3.- Ignorar la mayoría de los argumentos y preguntas que se expusieron.
4.- Y finalmente, como novedad, aportación de documentación, donde se podría comprobar que el Proyecto de Hospedería está aprobado por la Comisión de Patrimonio.
Sobre los tres primeros puntos queda poco que decir. Respecto al último, queda demostrado con todos los datos aportados por Antonio Manzano que la Comisión de Patrimonio aún no ha dado el visto bueno al proyecto.
Aquellos que deseen leer la respuesta dada por Antonio Manzano al periódico hoy a las acusaciones vertidas por el alcalde de Alburquerque.
lunes, 9 de abril de 2007
información visual
He aquí una guía visual de las imágenes más interesantes que hasta ahora se poseen sobre la futura hospedería:
Maqueta del proyecto. Primera, y única, información pública sobre la hospedería. Expuesta en un principio en una habitación de la segunda planta del Ayuntamiento. En la actualidad se encuentra en la tercera planta.
Dibujo del arquitecto del proyecto. Sacado a la luz pública tras el debate suscitado por la Plataforma para la Defensa del Patrimonio de Alburquerque (PDPA)
Montaje realizado por la PDPA en donde se puede apreciar claramente lo que en el dibujo original no se lograba distinguir
Fotomontaje realizado por la PDPA.
Fotomontaje realizado por la PDPA.
Fotomontaje realizado por la PDPA.
Maqueta del proyecto. Primera, y única, información pública sobre la hospedería. Expuesta en un principio en una habitación de la segunda planta del Ayuntamiento. En la actualidad se encuentra en la tercera planta.
Dibujo del arquitecto del proyecto. Sacado a la luz pública tras el debate suscitado por la Plataforma para la Defensa del Patrimonio de Alburquerque (PDPA)
Montaje realizado por la PDPA en donde se puede apreciar claramente lo que en el dibujo original no se lograba distinguir
Fotomontaje realizado por la PDPA.
Fotomontaje realizado por la PDPA.
Fotomontaje realizado por la PDPA.
domingo, 8 de abril de 2007
Manifiesto de la Plataforma.
MANIFIESTO DE LA PLATAFORMA PARA LA DEFENSA DEL PATRIMONIO DE ALBURQUERQUE
Los miembros de la Plataforma para la Defensa del Patrimonio de Alburquerque manifestamos nuestro rechazo al proyecto de convertir el Castillo de Luna de Alburquerque en una hospedería de lujo y requerimos de las Administraciones competentes su paralización por las siguientes razones:
1.- Consideramos que el desarrollo de Alburquerque y de Extremadura no pasa por la modificación y alteración de sus monumentos, sino todo lo contrario. Como testigos de nuestro pasado y de nuestras señas de identidad, cada uno de nuestros monumentos tiene que ser respetado y conservado y así lo establece la legislación vigente.
2.- En las últimas décadas la Comunidad Autónoma de Extremadura ha optado por un modelo de desarrollo basado en nuestros recursos naturales, culturales y artísticos y no entendemos que ahora se pretenda alterar una de las obras históricas más importantes y emblemáticas de Extremadura.
3.- El castillo de Alburquerque, además de ser Patrimonio Nacional desde 1924 (declarado como tal en el B.O.E. de 1949), es nuestra principal seña de identidad, es el símbolo de Alburquerque tanto de los que vivimos en la villa como de los que viven fuera de ella.
4.- No ha habido un anteproyecto ni se ha informado a la ciudadanía con suficiente antelación. La realización del proyecto ha sido hecha de manera sesgada y poco clara ya que se ha tramitado por un procedimiento de urgencia (ocho días de plazo para realizar alegaciones) y los ciudadanos no han tenido información visual hasta que no se ha puesto la primera piedra de las obras. Creemos que la información visual es necesaria, tanto en formato de maqueta como en fotomontaje, para que los ciudadanos tengamos claro cómo va a quedar el castillo, ya que la mayoría no entendemos un texto descriptivo de un proyecto arquitectónico.
5.- Alburquerque cuenta con una parte de su casco urbano declarado Conjunto Histórico. Este Conjunto está integrado por el castillo, el barrio medieval y algunas calles del barrio de extramuros. Si se construye la citada hospedería en el castillo, el principal monumento del municipio perderá su esencia medieval y todo el conjunto histórico se verá afectado.
6.- No sólo se verá perturbado el Conjunto Histórico sino todos los festivales y actividades culturales que actualmente se desarrollan alrededor o dentro del castillo: Festival Medieval, Obra de Teatro Medieval, Museo Viviente Medieval, Contempopránea, Pasión Viviente y Cursos de Verano. Estas actividades citadas no sólo han servido de incentivo económico sino también social, pues es el pueblo el verdadero protagonista de todos los actos que se celebran. Han sido todas ellas, por tanto, un verdadero motor de integración social.
7.- Así pues, el verdadero progreso deriva del trabajo realizado por el conjunto del pueblo y el turismo que año a año crece en Alburquerque y no por una hospedería de lujo de la que desconocemos su supuesta rentabilidad (puestos de trabajo, turismo,...).
8.- Si Alburquerque está siendo conocido en el resto del país se debe a sus festivales, por ejemplo, el festival de música independiente: Contempopránea es considerado el tercer festival más importante de música independiente de España. No deja de ser paradójico que el cartel de este año esté basado en la figura del castillo.
9.- El castillo es, por otra parte, un monumento y como tal ya tiene funcionalidad, en cuanto que es el principal reclamo turístico de la villa. Concretamente el año pasado, según los datos de la Oficina de Turismo de la localidad, visitaron Alburquerque unas 18.000 personas. ¿Qué pasará con los turistas que vengan a contemplar la fortaleza medieval y se encuentren en ella una mole de hormigón?
10.- Somos un grupo de ciudadanos amantes de nuestro patrimonio y conscientes de que debemos legarlo a las generaciones venideras de la misma forma que lo recibimos de nuestros antepasados. Queremos seguir contando con el castillo tal y como está para que siga siendo el motor de unión y desarrollo económico de nuestro pueblo.
¡Castillito de Alburquerque
quien te pudiera tener
metidito en la faltriquera
como un pliego de papel¡
lunes, 2 de abril de 2007
Comunicado original de la plataforma
Comunicado original de la plataforma
LA CAÍDA DE UN SÍMBOLO
Ante las últimas noticias sobre las inminentes obras en el castillo para construir una “hospedería de lujo”, un grupo de personas interesadas en la conservación del patrimonio histórico de nuestra histórica villa, Alburquerque, manifestamos nuestro desacuerdo con dichas obras por varios motivos:
1) Creemos que las agresiones que nuestra Villa ha sufrido en sus monumentos a lo largo de los años debido a las distintas actuaciones de nuestras autoridades políticas, tanto locales como regionales, están destruyendo nuestro patrimonio histórico. Recuérdese el convento del llano de monjas o la pérdida para siempre de la Glorieta. Entre las últimas agresiones, podemos señalar la “restauración” del entorno del Pozo de Alcántara. Lo de restauración es un decir porque, más que restauración, lo que se hizo fue una adulteración de ese entorno. Estas agresiones patrimoniales continuaron con las primeras reformas que se realizaron en la línea de defensa conocida como Recinto de los Portugueses. En este caso, y gracias a la manifestación en contra de las mismas, que llevamos a cabo una parte de nuestra población, se impuso el sentido común y se realizaron las modificaciones de manera que esas restauraciones no rompiesen con el entorno histórico en el que se debían de realizar. La cadena de estas agresiones a nuestro patrimonio histórico local continuaron con las reformas que se realizaron en el interior de su fortaleza medieval, aproximadamente por la misma época que las anteriormente citadas, y que culminaron con la construcción de una serie de aulas y de un porche que desentona de una forma escandalosa cuando se divisa el Castillo desde lejos, por lo que uno se puede imaginar la impresión que produce cuando se le observa desde cerca. Años más tarde, en el arreglo del adoquinado de algunas calles del llamado barrio del siglo XVII, no se respetó la disposición del acerado ni de la vía en las calles Miguel Alcantú y de Corianos, pese a la protesta de algunos vecinos. Los adoquines además quedaron mal colocados y actualmente estas calles están peor que antes. No se debe de olvidar tampoco, el intento, por parte de nuestras autoridades locales, de construir una serie de chalets en las inmediaciones de un yacimiento arqueológico, situado en el Risco de San Blas, cercano a la Villa, en el cual figuran una serie de pinturas de tipo esquemático que datan de la Edad del Bronce. En este caso, también la intervención de una parte de la población impidió que el proyecto siguiese adelante. La guinda de este pastel de nefastas actuaciones la puede colocar el pretendido proyecto de la Junta de Extremadura de construir una hospedería de lujo en el monumento principal de nuestra localidad, el Castillo de Luna, una preciosa fortaleza medieval, considerada como una de las mejor conservadas de España. Cuando conocimos el Proyecto de lo que se pretende realizar en él nos invadió una gran tristeza, nos preguntábamos cómo era posible que nuestros máximos representantes tuvieran tan poca sensibilidad a la hora de proteger nuestros monumentos. De las tres fases que tiene el Proyecto, tan sólo la primera es, desde nuestro punto de vista, coherente. Esta primera fase recoge “la consolidación, la restauración y puesta en valor de numerosos elementos arquitectónicos, de los que algunos se encuentran en trance de desaparición”. Las otras dos fases recogen la construcción de edificios de nueva planta. Así, se contempla construir un edificio que sirva de acceso principal a la Hospedería, un núcleo de ascensores vertical de 35 metros, una pasarela ligeramente inclinada de comunicación horizontal de 20 metros, de “hormigón armado coloreado con tierras naturales de la zona”, un túnel de 2m de ancho que comunicará las estancias que se encuentran alrededor de la plaza de armas, cuarenta plazas de aparcamiento, treinta de ellas cubiertas con chapas perforadas “de acero”, y otra serie de intervenciones que no pasamos a relacionar en este artículo por falta de espacio, pero que se pueden consultar en la memoria del Proyecto, que figura con el número de expediente, a0242206, en la página de la Consejería de Economía y Trabajo, de la Junta de Extremadura, en la sección, Servicio de Administración General (Secretaría General). Todas estas actuaciones, desde nuestro punto de vista, chocan frontalmente con el objetivo de nuestras leyes de conservación del patrimonio, que lo que pretenden es eso, conservar nuestro patrimonio.
2) Nuestras autoridades políticas aducen para la defensa de este Proyecto, que la hospedería dinamizará económicamente nuestro Pueblo. Tenemos la convicción de que este hecho afectará de forma negativa, a la economía local, en contra de lo que piensan nuestras autoridades políticas, pues un monumento reformado como se pretende, puede dejar de tener ya tanto interés, alejando al turismo amante del Patrimonio y de la Historia. Además, si nuestras autoridades quieren llevar a cabo inversiones de este tipo en Localidad, lo pueden hacer utilizando para ello otros de edificios, también históricos, pero no de tanto valor, y situados extramuros. Deben de entender que el foco principal de atracción del turismo a Alburquerque lo constituye su Castillo medieval, y que las personas interesadas en el Patrimonio, que lo visitan, lo que pretenden ver es que dicho monumento esté lo menos modificado posible, por lo que reformas importantes que se pretenden llevar a cabo, tanto interiores, como en los alrededores del mismo, adulterarían su esencia histórica, dejando de tener éste ya tanto interés, puesto que a muy pocos interesaría ver en el interior y en las inmediaciones de una fortaleza medieval del siglo XIV, modificaciones, que no restauraciones, del siglo XXI, que desentonan de una forma brutal con el recinto en el que se encuentran. Nuestro Castillo ya tiene funcionalidad por sí mismo, la de servir de testigo de nuestro pasado, de nuestra historia. Nos preguntamos también qué pasará con las actividades que en el castillo y en su entorno se llevan a cabo sobre todo en verano. Debemos tener en cuenta que se trata de una hospedería en donde se van a alojar personas que pagarán un alto precio por descanso y confort. ¿Casa eso con actividades como Contempopránea, el festival medieval, la obra de teatro, el museo viviente o las visitas guiadas al castillo?. Las autoridades han dicho que todas estas actividades están garantizadas, pero sinceramente nos resulta difícil de creer, máxime teniendo en cuenta que la hospedería la va a gestionar una empresa privada.
3) No deja de sorprendernos el hecho de cómo los responsables políticos interpretan ciertas leyes, como si existiera un doble rasero a la hora de aplicarlas, y decimos esto porque, cualquier reforma que se pretenda hacer en nuestro casco histórico ha de respetar de una forma estricta una serie de normas en cuanto a modificación de fachadas, cambio de cubiertas portadas, etc, que, efectivamente, han de cumplirse para que se modifique lo menos posible, para que sus casas y sus calles conserven ese aspecto y esa esencia medieval. Es por ello, que tanto más escrupuloso se debería ser a la hora de restaurar el monumento principal de la Villa, nuestro “Castillo de Luna”.
4) Nuestros políticos han de entender también, que nosotros tenemos la responsabilidad de transmitir a las generaciones venideras lo que nuestros antepasados nos han legado, de forma que lo disfruten de la misma manera que nosotros hemos disfrutado de ellos.
Este tipo de monumentos, tan importantes, nos sirven para comprobar que lo que los
investigadores reflejan en sus libros sobre nuestro pasado, se encuentra vivo en algunos edificios como es el caso de nuestro castillo.
Por todo ello, queremos llamar la atención de nuestras autoridades políticas para que recapaciten sobre la conveniencia de seguir adelante con el Proyecto, por lo menos en lo que respecta a sus dos últimas fases, pues la primera la consideramos positiva. Asimismo, deseamos que este artículo sirva para remover las conciencias de todos los alburquerqueños para que alcen su voz en contra de este despropósito, para que no caiga este símbolo de nuestra Villa, para que podamos seguir disfrutando de este maravilloso monumento, buque insignia del patrimonio histórico de Alburquerque.
Queremos que quede claro que no nos mueve ningún interés político y que tampoco nos oponemos al desarrollo económico de nuestra Localidad. El motivo que nos ha impulsado a escribir este manifiesto es intentar evitar un nuevo atentado a nuestro patrimonio histórico.
Plataforma para la defensa del patrimonio de Alburquerque.
1) Creemos que las agresiones que nuestra Villa ha sufrido en sus monumentos a lo largo de los años debido a las distintas actuaciones de nuestras autoridades políticas, tanto locales como regionales, están destruyendo nuestro patrimonio histórico. Recuérdese el convento del llano de monjas o la pérdida para siempre de la Glorieta. Entre las últimas agresiones, podemos señalar la “restauración” del entorno del Pozo de Alcántara. Lo de restauración es un decir porque, más que restauración, lo que se hizo fue una adulteración de ese entorno. Estas agresiones patrimoniales continuaron con las primeras reformas que se realizaron en la línea de defensa conocida como Recinto de los Portugueses. En este caso, y gracias a la manifestación en contra de las mismas, que llevamos a cabo una parte de nuestra población, se impuso el sentido común y se realizaron las modificaciones de manera que esas restauraciones no rompiesen con el entorno histórico en el que se debían de realizar. La cadena de estas agresiones a nuestro patrimonio histórico local continuaron con las reformas que se realizaron en el interior de su fortaleza medieval, aproximadamente por la misma época que las anteriormente citadas, y que culminaron con la construcción de una serie de aulas y de un porche que desentona de una forma escandalosa cuando se divisa el Castillo desde lejos, por lo que uno se puede imaginar la impresión que produce cuando se le observa desde cerca. Años más tarde, en el arreglo del adoquinado de algunas calles del llamado barrio del siglo XVII, no se respetó la disposición del acerado ni de la vía en las calles Miguel Alcantú y de Corianos, pese a la protesta de algunos vecinos. Los adoquines además quedaron mal colocados y actualmente estas calles están peor que antes. No se debe de olvidar tampoco, el intento, por parte de nuestras autoridades locales, de construir una serie de chalets en las inmediaciones de un yacimiento arqueológico, situado en el Risco de San Blas, cercano a la Villa, en el cual figuran una serie de pinturas de tipo esquemático que datan de la Edad del Bronce. En este caso, también la intervención de una parte de la población impidió que el proyecto siguiese adelante. La guinda de este pastel de nefastas actuaciones la puede colocar el pretendido proyecto de la Junta de Extremadura de construir una hospedería de lujo en el monumento principal de nuestra localidad, el Castillo de Luna, una preciosa fortaleza medieval, considerada como una de las mejor conservadas de España. Cuando conocimos el Proyecto de lo que se pretende realizar en él nos invadió una gran tristeza, nos preguntábamos cómo era posible que nuestros máximos representantes tuvieran tan poca sensibilidad a la hora de proteger nuestros monumentos. De las tres fases que tiene el Proyecto, tan sólo la primera es, desde nuestro punto de vista, coherente. Esta primera fase recoge “la consolidación, la restauración y puesta en valor de numerosos elementos arquitectónicos, de los que algunos se encuentran en trance de desaparición”. Las otras dos fases recogen la construcción de edificios de nueva planta. Así, se contempla construir un edificio que sirva de acceso principal a la Hospedería, un núcleo de ascensores vertical de 35 metros, una pasarela ligeramente inclinada de comunicación horizontal de 20 metros, de “hormigón armado coloreado con tierras naturales de la zona”, un túnel de 2m de ancho que comunicará las estancias que se encuentran alrededor de la plaza de armas, cuarenta plazas de aparcamiento, treinta de ellas cubiertas con chapas perforadas “de acero”, y otra serie de intervenciones que no pasamos a relacionar en este artículo por falta de espacio, pero que se pueden consultar en la memoria del Proyecto, que figura con el número de expediente, a0242206, en la página de la Consejería de Economía y Trabajo, de la Junta de Extremadura, en la sección, Servicio de Administración General (Secretaría General). Todas estas actuaciones, desde nuestro punto de vista, chocan frontalmente con el objetivo de nuestras leyes de conservación del patrimonio, que lo que pretenden es eso, conservar nuestro patrimonio.
2) Nuestras autoridades políticas aducen para la defensa de este Proyecto, que la hospedería dinamizará económicamente nuestro Pueblo. Tenemos la convicción de que este hecho afectará de forma negativa, a la economía local, en contra de lo que piensan nuestras autoridades políticas, pues un monumento reformado como se pretende, puede dejar de tener ya tanto interés, alejando al turismo amante del Patrimonio y de la Historia. Además, si nuestras autoridades quieren llevar a cabo inversiones de este tipo en Localidad, lo pueden hacer utilizando para ello otros de edificios, también históricos, pero no de tanto valor, y situados extramuros. Deben de entender que el foco principal de atracción del turismo a Alburquerque lo constituye su Castillo medieval, y que las personas interesadas en el Patrimonio, que lo visitan, lo que pretenden ver es que dicho monumento esté lo menos modificado posible, por lo que reformas importantes que se pretenden llevar a cabo, tanto interiores, como en los alrededores del mismo, adulterarían su esencia histórica, dejando de tener éste ya tanto interés, puesto que a muy pocos interesaría ver en el interior y en las inmediaciones de una fortaleza medieval del siglo XIV, modificaciones, que no restauraciones, del siglo XXI, que desentonan de una forma brutal con el recinto en el que se encuentran. Nuestro Castillo ya tiene funcionalidad por sí mismo, la de servir de testigo de nuestro pasado, de nuestra historia. Nos preguntamos también qué pasará con las actividades que en el castillo y en su entorno se llevan a cabo sobre todo en verano. Debemos tener en cuenta que se trata de una hospedería en donde se van a alojar personas que pagarán un alto precio por descanso y confort. ¿Casa eso con actividades como Contempopránea, el festival medieval, la obra de teatro, el museo viviente o las visitas guiadas al castillo?. Las autoridades han dicho que todas estas actividades están garantizadas, pero sinceramente nos resulta difícil de creer, máxime teniendo en cuenta que la hospedería la va a gestionar una empresa privada.
3) No deja de sorprendernos el hecho de cómo los responsables políticos interpretan ciertas leyes, como si existiera un doble rasero a la hora de aplicarlas, y decimos esto porque, cualquier reforma que se pretenda hacer en nuestro casco histórico ha de respetar de una forma estricta una serie de normas en cuanto a modificación de fachadas, cambio de cubiertas portadas, etc, que, efectivamente, han de cumplirse para que se modifique lo menos posible, para que sus casas y sus calles conserven ese aspecto y esa esencia medieval. Es por ello, que tanto más escrupuloso se debería ser a la hora de restaurar el monumento principal de la Villa, nuestro “Castillo de Luna”.
4) Nuestros políticos han de entender también, que nosotros tenemos la responsabilidad de transmitir a las generaciones venideras lo que nuestros antepasados nos han legado, de forma que lo disfruten de la misma manera que nosotros hemos disfrutado de ellos.
Este tipo de monumentos, tan importantes, nos sirven para comprobar que lo que los
investigadores reflejan en sus libros sobre nuestro pasado, se encuentra vivo en algunos edificios como es el caso de nuestro castillo.
Por todo ello, queremos llamar la atención de nuestras autoridades políticas para que recapaciten sobre la conveniencia de seguir adelante con el Proyecto, por lo menos en lo que respecta a sus dos últimas fases, pues la primera la consideramos positiva. Asimismo, deseamos que este artículo sirva para remover las conciencias de todos los alburquerqueños para que alcen su voz en contra de este despropósito, para que no caiga este símbolo de nuestra Villa, para que podamos seguir disfrutando de este maravilloso monumento, buque insignia del patrimonio histórico de Alburquerque.
Queremos que quede claro que no nos mueve ningún interés político y que tampoco nos oponemos al desarrollo económico de nuestra Localidad. El motivo que nos ha impulsado a escribir este manifiesto es intentar evitar un nuevo atentado a nuestro patrimonio histórico.
Plataforma para la defensa del patrimonio de Alburquerque.
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